La historia de nunca acabar

Viejos problemas, mismas quejas, todo igual. Los insultos al SIU Guaraní llegaron hasta el Facebook. Los estudiantes compiten a ver quién rompe el récord de mayor permanencia en el sistema para anotarse en la menor cantidad de materias. Una hora, una hora y media. Me anoté en dos, en tres, en ninguna. Ya perdemos la cuenta.
Después, hay que soportar la peor de las noticias: no te dieron la materia. Significa volver a meterse en el ballotage esperando que ahora sí se te dé. Casi como jugar al Quini. En el último llamado, 8200 inscripciones fueron rechazadas. De ellas, 4842 por "comisión completa": casi el 60%. Todo porque sobran alumnos y faltan profesores y aulas. Somos una familia numerosa. Muy numerosa.
La facultad había prometido que para este cuatrimestre estaría la explicación de cómo es la inscripción. Todavía seguimos esperando. Parece complicado explicar el sistema: de hecho, no lo hicieron en la Secretaría Académica cuando los consulté. Sí me aseguraron que el famoso ranking existe. Aunque parece que salir a decirlo fuera algo grave. En la Dirección de la Carrera lo habían negado. "Criterios académicos", también le llaman. La cuestión es que si aprobas más materias en menos tiempo, tenés más chances de que te asignen las materias que querés.
El Reglamento Académico es dónde debería figurar eso. Este año le agregaron otra cuestión. Si te rechazaron la misma materia durante dos cuatrimestres consecutivos, al tercero te tienen que aceptar la inscripción. Además, a quien le falta menos de tres materias para recibirse también le dan prioridad de inscripción. ¿Les parece justo este sistema?